¿Por qué si estamos bien solas debemos llamar a ese que sabemos que al verlo dejará pedazos de nuestro corazón diseminados por el piso, que tardaremos meses en volver a juntar?
¿Por qué por un minuto de cielo nos autocondenamos a vivir un año en el infierno?
¿Por qué queremos hacer encajar lo que no encaja, pegar lo que ya está roto, remendar lo que ya fue remendado?
Tal vez porque necesitamos sentir todas esas emociones para saber que estamos vivas, somos masoquistas nos gusta sufrir, me encanta tu blog, te sigo linda, saludos!
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